viernes, 28 de junio de 2013

miércoles, 26 de junio de 2013

Lo que me gusta de tu cuerpo

Lo que me gusta de tu cuerpo... Julio Cortázar 

Lo que me gusta de tu sexo es la boca.
Lo que me gusta de tu boca es la lengua.
Lo que me gusta de tu lengua es la palabra. 

 




martes, 25 de junio de 2013

Besos

Hay besos que pronuncian por sí solos
la sentencia de amor condenatoria,
hay besos que se dan con la mirada
hay besos que se dan con la memoria.


Hay besos silenciosos, besos nobles
hay besos enigmáticos, sinceros
hay besos que se dan sólo las almas
hay besos por prohibidos, verdaderos.


Hay besos que calcinan y que hieren,
hay besos que arrebatan los sentidos,
hay besos misteriosos que han dejado
mil sueños errantes y perdidos.


Hay besos problemáticos que encierran
una clave que nadie ha descifrado,
hay besos que engendran la tragedia
cuantas rosas en broche han deshojado.


Hay besos perfumados, besos tibios
que palpitan en íntimos anhelos,
hay besos que en los labios dejan huellas
como un campo de sol entre dos hielos.


Hay besos que parecen azucenas
por sublimes, ingenuos y por puros,
hay besos traicioneros y cobardes,
hay besos maldecidos y perjuros.


Judas besa a Jesús y deja impresa
en su rostro de Dios, la felonía,
mientras la Magdalena con sus besos
fortifica piadosa su agonía.


Desde entonces en los besos palpita
el amor, la traición y los dolores,
en las bodas humanas se parecen
a la brisa que juega con las flores.


Hay besos que producen desvaríos
de amorosa pasión ardiente y loca,
tú los conoces bien son besos míos
inventados por mí, para tu boca.


Besos de llama que en rastro impreso
llevan los surcos de un amor vedado,
besos de tempestad, salvajes besos
que solo nuestros labios han probado.


¿Te acuerdas del primero...? Indefinible;
cubrió tu faz de cárdenos sonrojos
y en los espasmos de emoción terrible,
llenáronse de lágrimas tus ojos.


¿Te acuerdas que una tarde en loco exceso
te vi celoso imaginando agravios,
te suspendí en mis brazos... vibró un beso,
y qué viste después...? Sangre en mis labios.


Yo te enseñé a besar: los besos fríos
son de impasible corazón de roca,
yo te enseñé a besar con besos míos
inventados por mí, para tu boca.


Gabriela Mistral


sábado, 15 de junio de 2013

Dios

Dios

Estoy en condiciones de afirmarlo.

Dios sabe elegir sus amistades y conocer,
perfectamente bien a las personas en quien se puede fiar.

A veces las cosas hablan en voz baja.
El silencio, poco a poca,
forma un remanso alrededor de una silla,
de un picaporte, inmediatamente
su realidad es una realidad distinta,
a la vez más impenetrable y más desnuda.

Mentíamos ante una cara tan simple
como ante algo sobrenatural
y sin saber porque sentimos deseos de arrodillarnos.

Entonces es cuando la voz
comienza a ser inteligible
y si le prestamos la atención que merece,
comprendemos lo que nos dice.

A mi al menos, los objetos que me hablaban con frecuencia son las perillas.

Aunque su voz tiene una opacidad de madera
su tono es tan rotundo.

Me elige, naturalmente como confidente
y me dice todo lo que hace,
lo que ha hecho,
lo que es.

Dios sabe elegir sus amistades.
¡Tiene tanta experiencia!....
A veces nos pasamos las horas charlando
sobre cualquier cosa y
como me tiene una confianza ilimitada,
me hace toda clase de confidencias.
A veces lo pongo en cada aprieto.


Oliverio Girondo.